Tuesday, September 19, 2006

En Tepic

Gracias... lo disfruté mucho mucho mucho =o)

Los Hermanos Peruanos

El verano de 2005, fuimos invitados a un festival en la ciudad de Tepic, Nayarit; dentro de él, venían delegaciones hermanas de diferentes partes de la república y del mundo, entre las que se encontraban, Puebla, Chihuahua, algunos grupos nayaritas y nosotros representando a Baja California; así también se encontraban los países de Argentina, Polonia y Perú.

Ya para este viaje, mi situación personal con algunos compañeros del grupo estaba cambiando. Fue un viaje lleno de detalles amargos y de desencantos. En el trayecto me di cuenta que los humanos somos los únicos seres capaces de lastimar por gusto; que tenemos la habilidad para levantar calumnias y así hacerle la vida imposible a otra persona.

Sin embargo, a pesar de mi no muy grato descubrimiento, y contrario a lo que estas personas esperaban, logre sacar provecho de la situación. No voy a mentir y decir que todo fue miel sobre hojuelas, claro que no; pero si puedo admitir que gracias a mi soledad obligada, pude conocer a otras personas, que irónicamente llegaron a conocerme mejor que mis propios compañeros, en unos cuantos días.

Estas personas a las que me refiero, son nuestros hermanos peruanos, de la Asociación Brisas del Titicaca, que tienen su cede en Lima, los pocos o muchos que logre conocer, están lejos de ser las personas que presentan en un programa, bastante popular; que podemos ver en televisión abierta, y que supuestamente, narra los problemas cotidianos de aquel país (y no lo menciono porque mis amigos peruanos se molestan cada que nombro a la conductora de este emisión televisiva).

Era muy agradable levantarme a desayunar, y que estuvieran esperando en la mesa los músicos que los acompañaban: Alex, Omar y Hernán, con quienes más conviví, con los que compartí alimentos y alguna canción. Los tres siempre atentos y amables, sinceramente creo que las personas que conviven con ellos a diario deben de sentirse orgullosas de tenerlos como amigos.

Recuerdo la bondad de Alex, el aire misterioso de Omar y los comentarios tan acertados de Hernán. Siempre les estaré agradecida por el tiempo que me regalaron.

Pero más recuerdo, a un bailarín, que fue la persona más allegada a mí en ese festival. La noche en que lo conocí, todo su grupo había armado tremenda fiesta en el patio de la casa donde nos hospedábamos. Este chico (que su nombre es Hugo Arturo), estaba con unos amigos y comenzamos a platicar, y después de ese día, nos buscábamos con frecuencia, intercambiábamos dichos y palabras altisonantes (como siempre y no puede faltar en esos encuentros interculturales); y fue surgiendo una amistad muy especial, que gracias a Dios hasta hoy sigue vigente.

Un día, por una mala jugada de alguien de mi grupo, dejaron cerrada la puerta de mi cuarto mientras yo me encontraba afuera, por lo que tuve que pasar lo que restaba de la noche en el pasillo de la casa. Pero como todo un caballero, mi amigo Hugo, se ofreció a acompañarme; y nos quedamos esa madrugada en el frío piso y la casa a obscuras, en una benévola noche de julio.

Todavía esta presente en mi memoria el cielo negro adornado con miles de estrellas, parecía que se podían observar todas; a pesar de lo bello de aquella noche, el cansancio nos iba venciendo, no supe si realmente dormí o si en realidad pasamos la noche en vela. Creo que a partir de ahí nos hicimos inseparables, las únicas ocasiones que no estábamos juntos era en las presentaciones o en el desayuno (pues ese tiempo estaba reservado para Alex, Hernán y Omar); sin embargo durante los descansos y en las noches, nunca nos faltó tema para conversar.

Ellos tuvieron que partir primero que todos, antes incluso, de la clausura del festival. Ese día, la mayor parte de nosotros estaba realmente triste, ya que estos hermanos peruanos, nos dieron una gran lección; nos enseñaron humildad, bondad, amistad, solidaridad y muchos otros valores que no cabría mencionar. Por mi parte, es a la única delegación que quisiera volver a ver en otro festival. Son las personas más completas que he conocido.

Vivirán por siempre en el corazón de sus hermanos cachanillas.

1 comment:

Anonymous said...

Que decir de esos ensayos bajo la lluvia, las canciones en cumpleaños tan diferentes pero sobre todo, la sonrisa que nunca faltaba, quiza eso hace que la hermandad cultural haya crecido cuan ola sobre el mar en tan poco tiempo . . . definitivamente Que viva el Peru señores, por Hugo, por Luis, por Richi, por Juan Diego, por Juan Carlos, por kike, por Mario, por Alex . . . y si menciono a todos se hace larguisimo el comentario que mas que eso parece una segunda parte de tu escrito . . . que noches las de Tepic, que farmacia la de tepic pero sabes? QUE LAVANDERIA TAN MAS HERMOSA . . .